Los Tigres del Norte

Revisa tu ropa, tu cara, tu cuello
Que no haya una seña, que no haya una huella
Que nunca se entere, que en brazos de otra
Cabalgas al cielo, que tocas estrellas.

Pero la luna se mira mejor,
De otra cama donde no hay su olor,
Si tu lluvia de amor ya es de otra
Procura que al menos no se entere ella

Disculpa mi amigo, pero esta es mi vida
Y no deberías meterte en mis cosas.
A ella la quiero, y nada me importa,
Porque esta aventura es más poderosa.

Como tú ya viví esa experiencia,
Y hoy me mata la perra conciencia,
Hoy no duermo tranquilo en mi cama,
Ni feliz con una, ni feliz con otra.

Tú comprende mi amigo, es que en estos momentos
No hay nada mejor que esos brazos prohibidos,
Pero insisto mi amigo, no la dejes tan sola
Que el viento está helado y precisa un abrigo

Y al final solo queda un vacío en el alma,
Y el peligro latente, que otro duerme en tu cama

Disculpa mi amigo, pero esta es mi vida
Y no deberías meterte en mis cosas.
A ella la quiero, y nada me importa,
Porque esta aventura es más poderosa.

Como tú ya viví esa experiencia,
Y hoy me mata la perra conciencia,
Hoy no duermo tranquilo en mi cama,
Ni feliz con una, ni feliz con otra.

Tú comprende mi amigo, es que en estos momentos
No hay nada mejor que esos brazos prohibidos,
Pero insisto mi amigo, no la dejes tan sola
Que el viento está helado y preciso un abrigo

Y al final solo queda un vacío en el alma,
Y el peligro latente, que otro duerma en tu cama.